domingo, 28 de septiembre de 2008

Fundación y poblamiento (1552 - 1554)

Luego de la fundación de La Imperial y de la llegada de refuerzos desde el Perú (octubre de 1551) Valdivia pondría en marcha su hueste hacia el sur llegando al valle de Mariquina. Desde allí despacharía una partida al mando de Jerónimo de Alderete para reconocer la costa. Los indios creyeron que el era el momento adecuado para atacar a los españoles, pero serian severamente derrotados por éstos.
Cuando aun se encontraban en el valle de la Mariquina (a orillas del río Cruces) llegaban los refuerzos que traía desde el Perú Francisco de Villagrán.
En enero de 1552 llegaría a las cercanías del lugar donde se juntan dos ríos según relatos de sus exploradores. Antes de cruzar el Calle-Calle, el gobernador Valdivia y su hueste se enfrentaría a las escaramuzas de los indios que defendían la ribera contraria, pero gracias a la intervención de una india llamada Racloma (leyenda o realidad, no hay datos suficientes) pudo cruzar el torrente en paz y realizar la fundación de una nueva ciudad.
Fue fundada la ciudad, el 9 de febrero de 1552, por Pedro de Valdivia, en el lugar donde se levantaba la población india de Aintil. Uno de los pocos documentos existentes que grafican la fundación de Valdivia son las Crónicas de Gerónimo de Vivar. He aquí un fragmento:
“Visto el gobernador tan buena comarca y sitio tan bueno para poblar una ciudad y ribera de tan buen río, y teniendo tan buen puerto, fundo una ciudad e intitulola ciudad de Valdivia, e hizo allds (alcaldes) y regimiento. Fundose el nueve de febrero año MDLII. Despacho al general Gerónimo de Alderete con treinta hombres que fuese a poblar a la alaguna que dije que había señalado un sitio y que allí poblase una villa, la cual puso por nombre la Villarrica a causa de la gran noticia que se tenia de minas de oro y plata, y que los indios de aquella comarca repartiese en aquellos españoles y en otros que Francisco de Villagran le enviaría cuando volviese de La Imperial.”
“Esta ciudad de Valdivia esta asentada en un llano; tiene algunas hoyas el río que pasa junto a ella cerca de la mitad de la ciudad. Está dos leguas de la mar y los navíos entran hasta la ciudad por él. Hay alrededor de esta ciudad muy grandes montes y en sus términos…”
(Capitulo CVIII, páginas 158 y 159, Crónica y Relación Copiosa y Verdaderas de los Reinos de Chile, Gerónimo de Vivar)

“Por hebrero deste presente año de 1552, poblé la ciudad de Valdivia; tienen de comer cient vecinos; no se si cuando les hobiere de dar las cedulas podrán quedar todos.” (Extracto de una carta de Pedro de Valdivia a Carlos V. 26 de octubre de 1552)

Valdivia dejaría a setenta vecinos, creaba un cabildo y designaba al licenciado Julián Gutiérrez de Altamirano como alcalde y justicia mayor de la ciudad. El primer cabildo estuvo formado por los alcaldes Francisco de Godoy y Alonso de Benítez y fueron sus regidores Cristóbal Ramírez, Pedro de Pantoja, Pedro Guajardo, Lope de Encinas y Hernando de Alarcón; el escribano era Juan Fernández de Almendras. Entre los vecinos de esta nueva ciudad estaban Rodrigo de Orozco, Cosme Gutiérrez de Altamirano, Andrés Salinas, Pedro de Ocampo, Diego de Eslava, Martín de Quezada, Diego Nieto y su esposa Leonor Cervantes, Francisco de Herrera Sotomayor, Cristóbal Ramírez, Juan de Montenegro, Pedro Fajardo, Juan de Matienza, García de Alvarado, Diego Ortiz de Gatica, Esteban de Guerrero, Martín Gallegos y Gaspar de Robles. Entregaría además a Jerónimo de Alderete, Diego Nieto de Gaete y Julián Gutiérrez de Altamirano encomiendas de indios. A Alderete le entregaría una encomienda de cien indios en las cercanías de Valdivia.
Antes de continuar su travesía conquistadora y fundacional el gobernador enviaría a Jerónimo de Alderete junto a 60 soldados a reconocer las tierras al noreste de la ciudad. Alderete llegaría a orillas de un lago donde nace el río Toltén. En ese lugar fundaría en abril la ciudad de Villarrica, dotándola de cabildo y cuarenta vecinos. Hecho esto volvería hacia el este a encontrarse con el gobernador Valdivia.
Valdivia en tanto, marchaba hacia el sur con cien jinetes. Llegaría hasta las orillas del lago Ranco donde se encontraría con un río muy caudaloso el cual le impidió continuar su marcha hacia el sur. Esto y el factor climático lo obligaron a devolverse al norte.
El 20 de julio de 1552 el Cabildo solicitaba al rey la concesión de armas a Valdivia, dignándose además “hacer merced a los dichos descubridores y pobladores, que cada uno dellos pueda tener por suyas las armas del pueblo donde viviese y como tales traellas y ponellas en sus reposteros.”
A mediados de 1553, Pedro de Valdivia encomendó a Francisco de Ulloa reconocer la ruta del Estrecho de Magallanes. Esta expedición zarparía desde Valdivia. Ulloa iría al mando de uno de los 2 barcos y Francisco Cortes Ojeda el segundo barco. Ulloa fue el primer navegante en reconocer y navegar el golfo que se abre entre la Isla Grande de Chiloé y el continente, al cual llamó golfo de los Coronados, en homenaje de los cuatro santos coronados: Severo, Severino, Carpóforo y Victorino, que vivieron en la última parte del siglo III y a comienzos del IV. Además del golfo citado, Ulloa descubrió: la Isla Grande de Chiloé, la isla Guafo, el archipielago de los Chonos y la península de Taitao.
Por Real Cédula rubricada por Carlos I y la reina Doña Juana, del 18 de marzo de 1554, se le dio el titulo de ciudad y con ello su escudo de armas, acompañado por la frase “Ciudad muy noble y muy leal”.
“Escudo que hay en él, un río y una ciudad de plata, que está asentada sobre el mismo río y encima de una torre de la misma ciudad, una bandera blanca con una cruz roja y por orla de dicho escudo siete hojas verdes, verde de higuera, en campo de oro y sobre el escudo un yelmo cerrado, con follaje o dependencias de oro y verde y sobre el yelmo, por divisa una sierpe verde de medio cuerpo arriba”.
(Gabriel Guarda, Una ciudad chilena del siglo XVI. Valdivia 1552 – 1604…)